viernes, 13 de junio de 2008

Ver.

Son imágenes congénitas, gritos endemoniados, mazorcas en el suelo. Es la luz tenue de las velas alumbrando el cuarto fúnebre, el cuarto de su propia muerte. Es la anciana embadurnada de collares hablándole a las sombras. Es ella refutando su cuerpo, su sangre, evocando a sus compañeros.

(Anamorfosis de sentimientos.).